El otoño del patriarca en muchas maneras es una interpretación de la historia, pero esta no termina ahí, esta novela esta llena de excesos: el primero es la manera en que esta escrita; de una manera muy-pero muy densa y casi sin ningún punto o coma, la conocida exageración del autor llega a sus limites, el personaje principal no solo esta aquejado por un montón de plagas, también tiene rasgos de animales, tiene un poder que va mas allá de lo político, es un poder que se asemeja al de un dios.
Desde un comienzo a la historia (la de aspecto académico) se la vuelve a interpretar y a mi parecer se le hace justicia. La historia que esta novela nos muestra es mas convincente que la contada oficialmente. Lo es por que es la versión vivida por los protagonistas: el pueblo y el dictador. Por ejemplo en la novela uno ve a la patria de Patricio Aragonés, el dictador, en ruinas y luego vemos cómo esta es vendida a los extranjeros. Vemos cómo el ejercicio del poder no solo llena de gloria pero también confunde y condena al dictador.
Las llegadas al poder de los dictadores son violentas pero también, una ves instalados en el poder, tienen algo letárgico ya que la sensación de la realidad y el tiempo parecen suspenderse, los gobiernos de los dictadores parecen siempre eternos, y sus delirios son normalizados y hasta oficializados. La historia de una patria bajo el senil poder de un dictador es una historia universal que ocurre y seguirá ocurriendo en todos lados del mundo. Las persona que toman mando son personas que, ante la población, se convierten en un espectáculo que se hace llamar progreso.
El otoño del patriarca, como novela es de semejante estatura como Cien años de Soledad, gracias a su osadía. Claro esta que estas son excepcionales obras por sus propios méritos: en una, la historia de toda una familia y su pueblo, y en la otra la historia de un dictador y su patria. Pero más allá de lo obvio a ellas incumbe los temas mas recurrentes que fascinaban a este autor: el poder, el amor, y la historia. Cuál historia podría ser más rica que la nación que nunca existió, pero que todos conocemos. Esa tierra prometida que solo vive en sueños y que en realidad en muy distinta a la que nos toca vivir. El otoño del patriarca narra la historia del dictador y la relación autodestructiva, y patológica, que tiene con su pueblo y el gobierno. Esta magistral narración de la vida de un dictador nos cuenta la historia de todo un continente a través de las locuras de un personaje. El dictador.
Peter Verastegui 